Reseña: El amor es una montaña rusa

Buenas tardes soñadores,

Hoy os traigo una nueva reseña, en esta ocasión tengo que dar las gracias Phoebe Romántica por poderme dar la posibilidad de leer lo nuevo de Romina Naranjo. Novela que salió a la venta la semana pasada y de la cual ya muchos la habéis leído. Pero ahora me toca mi turno, poder darnos mi opinión.

Los que ya habéis estado por aquí en otras ocasiones, ya sabéis cuánto adoro este género en todas sus variantes. Por lo que lo que estaba buscando en esta ocasión era una novela fresca y divertida, y después de ver su portada uno no esperaba otra cosa ¿no?

El amor es una montaña rusa es una novela autoconclusiva dentro del género de romántica con comedia. Si uno lee su sinopsis se puede ir haciendo una idea de por dónde se encaminará el trama. Y es aquí donde de primeras conoceremos a Nina o rizos para los más allegados. Nina se está intentando hacer un hueco en el mundo del periodismo, pero quizás donde ha acabado no es el mejor camino. Trabaja para nada más y nada menos que la farándula española, reality show y un sin fin de programas más que a los que ella intentan dar una nueva vuelta.

Pero todo se precipitará cuando tenga que decidir entre quedarse en el paro o intentar seguir escalando en el mundillo. De primeras es previsible lo que le van a ofrecer y quizás hasta como se vaya a desarrollar. Por lo que rápidamente nos vemos inmersos en un pueblo de la España profunda junto con un clon de Jim Morrison, la hermana de Miércoles y un señor que siente gran afición por los bocadillos de chorizo. Todos ellos serán el elenco con el que conviviremos cinco semanas.

Durante este período la autora nos meterá de lleno en el día a día de un reality show, incluido las pruebas por las que tendrá que pasar Nina, decididas por la audiencias y ¡Woooaaa! 

En sí es una novela con toques de humor que nos arrancará alguna que otra carcajada simplemente por lo rocambolesco de la situación, pero también tendrá sus momentos dramáticos en los que nos meteremos de lleno en la cabeza de Nina para ir descubriendo que a veces no todo es como ella se imaginaba, sino que puede tener consecuencias de lo más desagradables.

Ahora pasemos al momento relación romántica que a veces ya sabéis que me chirrían, y creo que en esta ocasión ha sido lo que me ha sucedido. Era un romance previsible desde el minuto cero, pero quizás eso no es lo más preocupante, sino el hecho de notar como se forzaba ese romance. En ningún momento he sentido que todo fluía, que los protagonistas se dejaban llevar, sino que eran obligados para el desarrollo de la trama. No he sentido el feeling entre los protagonistas y creo que se debe a la rapidez en la que se sucede todo.

Creo que si hablamos de romance, si que lo he encontrado en Jesús y Cayetana, el hermano y la mejor amiga de Nina. Y tengo que decir que estoy realmente deseando saber cómo será su historia, porque de esos dos es mejor no perderse ninguna conversación y es que gracias a Nina, podremos ver algunas pinceladas de los que nos espera.

Por último y lo más sorprendente de esta historia ha sido su final. ¿Esperable? Sí, pero no el cómo ha sido su desenlace, creo que eso ha sido lo más divertido de todo. Poco a poco las piezas irán encajando y es que su autora nos irá dejando miguitas de pan para que como lectores nos podáis ir haciendo una idea del final y aunque viviremos “el momento crítico”, ha sido genial, creo que es así como me imaginaría el final de un reality show.

El amor es una montaña rusa es una novela romántica sencilla con sus toques de humor y drama que si sois aficionados a los reality show, no podéis dejar de leer.