Una siempre cree estar satisfecha con la vida que tiene. Yo, por ejemplo, así lo siento.
Tengo una relación estable con un chico que me quiere y que me encanta, mi vocación es mi trabajo, me rodeo de buenos amigos, tengo salud y unos padres que me apoyan en todo.
No pido nada más. Pero si esto fuera así, no tendría nada que decirte.
Porque nada es lo que parece y porque, de un día para otro, en un abrir y cerrar de ojos, el destino puede reírse de ti en tu cara y jugártela hasta que ya no sepas ni quién eres ni qué es lo que te gusta.
Y estoy asustada. Y todo va muy deprisa. Y no estoy preparada. Pero sé que tengo que ser valiente. Y lo voy a ser por mí, y también por ti, porque puede que hayas pasado o estés pasando por lo mismo.
Tengo demasiado que contarte y mucho que cantarte. No me dejes cantar sola.
Música, famoseo y romance, una combinación de la que es poco posible que no acabe atrapándome. Lo primero que tengo que decir, es que me encanta esta autora, y creo que casi libro que saca, libro con el que me hago con él. Aunque tengo que decir que esta historia se aleja a todo lo que nos tenía acostumbrados y me ha sorprendido con creces, porque desde luego ha sido todo un acierto, me he enamorado de estas novelas.
Lo que nunca te canté es una bilogía que fue publicada el año pasado bajo el sello de la Editorial Vanir. Dos libros, que son totalmente indispensable comprar a la vez, porque uno no puede vivir con la intriga de ese final de la primera parte.
La historia comienza presentándonos a Kira, una mujer que tiene un gran talento, compone música pero de una manera íntima, una forma de curar su alma y expresar esos sentimientos y emociones que a veces se le quedan atascados. Lo que nunca imaginó es que su novio fuera capaz de haber negociado los derechos de la canción con una importante discografía de Barcelona. A primeras uno puede suponer que lo hace por hacerla una favor, pero nada más lejos de la realidad, lo único que busca Andrés, su novio, es su propio beneficio. Por lo que ahora Kira se encuentra con que su preciada canción sonora en Eurovisión y será interpretada por la gran Queen Bee, una estrella del pop, de la que Kira siente una profunda admiración.
Queen Bee, es una cantante fabulosa, salida de un concurso televisivo y que ahora mismo esta en las posiciones más altas en el panorama musical. No todos sus compañeros consiguieron tanta proyección, entre ellas su exnovia Barbie, quien parece enganchada a la Abeja Reina con único propósito, catapultar su carrera.
Con este inicio, uno ya sabe que el drama está servido. La vida de Kira y Queen Bee, se verá unida por un canción. Ambas con sus heridas irán conociéndose poco a poco, creando entre ellas no solo una amistad, sino algo mucho más fuerte y que se fuera cociendo de manera lenta, con sus dudas, con sus ganas de querer, ha sido un punto muy a favor de esta historia.
Ambas protagonistas son fuertes, decididas pero con numerosas cicatriz que a simple vista no pueden verse, sobre todo con Queen Bee, quien ha creado una perfecta fachada donde esconder sus sentimientos, lo que traerá de cabeza a Kira, quien deberá ver su vida desde una óptica totalmente distintas, y no solo en el amor, sino en todo en general, es hora de que ella tome el mando y empiece a tomar decisiones.
Con respecto a los personajes secundarios creo que hacen una gran presión para que la historia vaya tomando un curso que quizás no imaginemos, que Kira se decida a que Queen Bee cante su canción será quizás lo más difícil que hará en su vida, aunque se irá dando cuenta de que lo que más ama es crear canciones, ha esto hay que darle las gracias a esos personajes que como Andrés o Barbie hacen la vida imposible, catapultando sus vidas un paso más lejos, camino hacia su sueño.
Lo que nunca te canté tiene un estilo sencillo y fresco, contado en primera persona, por lo que he podido sentir o pensar lo que le iba sucediendo a Kira de una manera natural y espontánea, sin perderme siquiera esos detalles que hace que sienta los personajes de una manera más cercana. Aunque quizás hubiera necesitado una segunda revisión antes de publicarla, y lo digo simplemente por las pequeñas incongruencias que ido encontrando como el nombre del novio de Kira.
La novela ha sido todo una explosión de música, pues una de las cosas que mas me ha gustado ha sido que tanto su autora como la editorial no han dudado en incluir la banda sonora de libro a través de un cogido QR impreso en las solapas del libro. Creo que esto ha conseguido incluso una experiencia sensorial mucho más amplia que la propia lectura, pues podía ir imaginándome la escena con esa música de fondo, haciendo que todo adquiriera un sentido más profundo. Aunque como podéis ver no solo la música se ha reflejado en la historia o en este contenido más amplio como la BSO, sino que ademas los libros se llaman igual que los cassette de antaño, cara A y cara B, ha sido muy original.
En sí ha sido una novela romántica sencilla, en donde predomina el amor libre sin tapujos, todo ello rodeado de una banda sonoras que hace que las vivencias de los personajes sean algo más íntimo.
Lo que nunca te canté ha sido una historia que me ha sorprendido con creces, que he disfrutado y cantando. Una novela altamente recomendable para el verano.
