Sigueme la corriente

Tony Ferrasa es un guapo, adinerado y exitoso compositor de música puertorriqueño. No hay mujer que se le resista y que olvide con facilidad su mirada verde y leonina. 

Ruth es una joven que con apenas veinte años tuvo que hacerse cargo de su hermana recién nacida y de un hermano delincuente. Cuando parece que por fin consigue encauzar su vida,  se queda embarazada y su pareja acaba abandonándola.

Para sacar adelante a su familia acepta cualquier trabajo digno que se le presente, por lo que Tony y Ruth acaban conociéndose en una fiesta en la que ella sirve como camarera. A partir de entonces, como el destino es tan caprichoso, se encuentran en diversas ocasiones, y a pesar del interés que él le demuestra, ella se mantiene fría e indiferente. 

Poco a poco ambos se van enganchando a una no-relación que acaba por desvelarles que lo que sienten el uno por el otro es mucho más intenso de lo que están dispuestos a admitir.
Intentan alejarse, pero cuanto más empeño ponen en ello, menos lo consiguen y más fuerte se hace la atracción. 

 

Opinión personal:

¡Bueno, soñadores! Esta lectura y sobretodo su reseña se han hecho esperar, y es que tanto lío no es bueno, pero al fin pude realizarla.

¡Me encantó Tony Ferrasa! Así empiezo de fuerte, ¿Mejor que Dylan? Mmm, sí. ¿Mejor que Yanira? También. Para empezar tengo que decir que Yanira en Adivina quién soy, y Adivina quién soy esta noche, no me caía muy haya, pero después de conocer a la alocada Ruth, me cae peor, lo siento soñadores, pero si es que aún no habéis conocido a Ruth no sabéis como es esa mujer, trabajadora, encantadora, luchadora, y con un enorme corazón, pero vayamos por partes que siempre me adelanto a los acontecimientos, la impaciencia es lo que tiene.

Este nuevo libro de Megan Maxwell, se presenta como la continuación de la vida de los Ferrasa, pero esta vez desde la perspectiva del hermano mediano, Tony Ferrasa, si anteriormente leísteis Adivina quién soy y Adivina quién soy esta noche, uno se puede imaginar como es este hombre, y aunque a veces sea serio y muy cuadriculado con su trabajo y con su vida, todo da un vuelco cuando conoce a la chica Arco Iris, Ruth, quien realmente no es más que una trabajadora, y su primer encuentro resultaran más que desastroso, ella derramando varias copas y él, bueno sin dejar de poder mirar su pelo multicolor, os podéis imaginar la situación, y será justo aquí cuando empezara un juego al que ninguno de los dos anteriormente había jugado.

Ruth por su parte no tiene tiempo de amoríos, tiene suficiente con llevar dinero a casa para alimentar a su familia, pero eso no quita que se quede sin aliento al ver a Tony, y sin dejarse impactar por su aspecto físico no durara en vacilarle en cualquier momento, haciendo que Tony no entienda como esa mujer no cae simplemente rendida a sus pies.

Tampoco podemos olvidar que alrededor de esta curiosa pareja tendremos a los personajes de los anteriores libros, Yanira, Dylan, Omar, Tiffany… Aunque de todos quien sufrirá un cambio radical es el patriarca de los Ferrasa, quien aceptará a Ruth a la primera, debe ser que el pelo multicolor le ha trastocado y ha decidido vivir a otro ritmo,  pero también aparecerán nuevos, como la pareja de homosexuales best-friend de Ruth, quienes me encantaron por sus bromas y su forma de querer a Ruth, siempre estando ahí para ella, pero si me tengo que quedar con tres monadas... Serán ellos, ¿Quiénes son ellos? Deberéis de leerlo, y hazme caso os enamorareis igual que yo.

Otra de las cosas que me sorprendió gratamente es que sin pretenderlo, su autora consigue incluir una libro sobre una historia de amor en dos, y con esto me refiero a la relación de Omar y Tiffany, ambos han decidió seguir sus vidas de manera separada, pero conforme va pasando el tiempo Omar se va a dando cuenta de lo estúpido que fue, e intentará hacer todo lo posible para reconquistarla.

En este nuevo libro los detalles del anterior han sido cuidados, y por eso hace que se especial, puedo decir que de los tres libro Ferrasa, este es mi preferido.

 

Puntuación 4/5