Prohibiciones de la Feria del Libro de Madrid

¡Buenos tardes, soñadores!

Menudo frío hace, bajada de temperaturas extremas, creo que así podremos conservarnos bien, mejorar nuestro cutis y quemar muchas calorías.

Si es que yo soy mujer de calor, solecito… ¡Ven a mí, primavera! Para no forzar mucho las estaciones.

Hoy vengo con muchas ganas de hablaros sobre un tema que me ha mosqueado bastante, y creo que como amantes de los libros deberíamos de saber, e intentar en la medida de lo posible hacer cuanto esté en nuestras manos para que cambie. Y es que hay cosas injustas pero ésta, no es más que una injusticia derivada del miedo.

No hablo de otra cosa que del magnífico reglamento que uno debe de cumplir, para poder estar en una caseta de la Feria del Libro de Madrid. 

Pero no nos engañemos, esto no es nuevo, lleva pasando desde hace varios años, como me han comentado, y yo viviendo en la ignorancia… por lo que creo que va siendo hora de conocer cómo funcionan las cosas de verdad.

Tras echar un vistazo a este famoso reglamento, ya os digo que si queréis leerlo no es muy extenso, cuenta con unas 11 hojas, y podéis leerlo en Reglamento, me gustaría destacar el porqué de esta entrada, como podéis ver a continuación, los dos artículos que he querido destacar han sido el 6 y 15.

 

Curiosos artículos en los que ambos no están de acuerdo con la igualdad de oportunidades.

En el primero claramente te dice que si tu no eres un súper ventas que te olvides, que o estás en la mayoría de las librerías, o tu participación te la puedes ahorrar. Pero no solo se queda aquí, sino que encima esos editores que se encargan de la autoedición, así como pequeñas editorial, que ofrecen la oportunidad de cumplir los sueños de esos escritores principiantes, tres cuartos de lo mismo.

Y ya en el segundo, claramente te prohíbe que los vendas, vaya que no tenían suficiente con no dejarlos participar, sino que para más inrri y recochineo, te digo que tampoco los puedes vender, ¿Qué pasa? ¿Da miedo que consiga más ventas que las grandes editoriales?

Pero en serio, ¿A dónde vamos a parar?

Y es que es aquí cuando, puede que se nos olvide que todos esos autores que ahora nos encantan, empezaron con un simple manuscrito y probando suerte, o incluso autoeditandose, pero alguien de las esferas más altas en el mundo editorial, les dio esa oportunidad, ¿Por qué cortarles las alas a autores que quieren probar otra manera distinta de publicar? ¿O que simplemente prefieren una editorial pequeña por el trato que reciben? 

Entonces pensando y pensando, el porqué no ofrecen una igualdad de oportunidades, a la única conclusión a la que he podido llegar es a que les tienen miedo, tienen miedo de que las colas por ver a esos autores, poco reconocidos, pero si interesados por sus lectores, ganen más audiencia que aquellos que ya tienen un nombre consagrado en el ámbito de la literatura. Y sobre todo, que se vean afectados a nivel económico, que es realmente donde se encuentra el negocio en la Feria del Libro.

Que yo diga todo esto, y aunque penséis muchos que soy una hipócrita, no voy a dejar de ir a conocer a esas autoras que han empezado hace poquito, o a las que ya conozco y con las que me encanta charlar. Porque entre toda esta industria que tiene más miedo que otra cosa, hay muchas autoras en grandes editorial que están totalmente encontrar de lo que sucede, y os digo más, hay incluso autoras que echan un cable a nuevos escritores que intentan hacerse un hueco en este mundillo. 

Pero lo que si os digo, y me uno totalmente a la idea, es que no pienso comprar ni un solo libro en este evento, porque no olvidemos que esas semanas se disparan las ventas.

Con esta entrada, soñadores, lo único que he pretendido es daros a conocer un poquito más cómo funcionan esos grandes eventos de cultura, y como el rasero con el que se mide, no es para todos igual.

Nunca olvidéis que esto no es más que una opinión, espero las vuestras abajo.