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viernes, 4 de febrero de 2022

RESEÑA "Lady Jane"






                                                                                                      Editorial: Vergara

Año de edición: 2021

Materia: Novela romántica

ISBN: 978-84-18620-02-7

Páginas: 344



Todo el mundo sabe que a una joven soltera que posea una cierta fortuna le hace falta un esposo, y lady Jane Milford no es una excepción. Por eso acaba de ser presentada como debutante para cumplir con el deber que marca la sociedad: casarse con el pretendiente más adecuado Sin embargo, el destino pondrá en su camino a Blake Norwood, heredero del título de marqués de Heyworth, y uno de esos hombres inapropiados pero fascinantes que hacen temblar el cuerpo entero y también las más férreas convicciones. Mientras Jane se debate entre hacer lo correcto o dejarse llevar por su deseo hacia Blake, comienza a recibir una serie de cartas firmadas bajo el misterioso seudónimo de lady Minerva, quien la anima a explorar el alcance de su pasión y los límites de su cuerpo para entender cómo son en realidad las relaciones entre hombres y mujeres, descubriéndole un mundo de sensaciones que nunca pensó que pudiera existir.







Es una novela que desde que se anunció que se publicaría para el bajo del sello de Vergara, estaba deseando leer, y gracias al amigo invisible he tenido la oportunidad de hacerlo. Adoro este tipo de novelas, y estaba deseando volver al este mundo al más estilo Jane Austen. De primera me cautivó la portada, con esos colores y de pleno nuestra protagonista. Tengo que decir, antes de empezar con la reseña, he oído reseñas muy positivas, por lo que eso hizo aún más que me decantara a leerlo. 


Lady Jane es la primera entrega de una serie, que espero que sea una serie, de la familia Milford, en donde conoceremos a la mayor de las hermanas. Jane Milford es una joven soltera que posee una importante fortuna, por lo que debe encontrar un esposo acorde a su estatus y que mejor que empezar hacerlo que tras su presentación en sociedad. En esa búsqueda entre el amor y el deber, se interpondrá en su camino Blake Norwood, el nuevo y americano marqués de Heyworth, un hombre de lo más inapropiado que le hace temblar y plantearse todo aquello en lo que fue educada. Mientras Jane no tiene claro que hacer con Blake y con el resto de pretendientes que quieren pedir su mano, comenzará a recibir una serie de cartas de lo más curiosas firmadas bajo el pseudónimo de Lady Minerva, quien le anima a conocer la pasión y a descubrir más allá de lo que le han enseñado sobre la relación de hombres y mujeres. Lo que es intrigante es ¿Quién será quien se esconde detrás de esas cartas? ¿Y finalmente cual será las consecuencias de las decisiones que tome Lady Jane? 


Es una novela totalmente adictiva, con todos los elementos típicos de este tipo de libros, a pesar de que su desenlace sea totalmente previsible, lo mejor de esta historia son sus personajes, y no solo los principales, sino todo el elenco, que nos ayudará a conocerles más a fondo, metiéndonos de lleno en la trama, y en esto tengo que destacar, que el hecho de que sea una novela contada a dos voces, ayuda a conocer más los sentimientos, pensamientos y esas grandes decisiones que cambiarán sus vidas para siempre. 


Tiene un buen ritmo que se mantiene constante, y se hace entretenido, con todo esto, la autora ha conseguido mantener al lector pegado a sus páginas, ya os digo que no es para menos. Este es el primer libro de Charlotte Grey y estoy deseando leer ya Lady Emma, el segundo título independiente y autoconclusivo. 


Lady Jane es una novela entretenida, llena de romance y bailes, en donde a veces el amor es más que el mantener el estatus.  

 



jueves, 7 de enero de 2021

Reseña "Fue un martes"


 









Nos conocimos un martes. Nos convertimos en amigos íntimos y luego en amantes un martes. Y todo acabó un martes… Había tres cosas de Charlotte Taylor cuando la conocí en la universidad que debéis saber: 1. Me odiaba. También afirmaba que yo era «un mandón imbécil con un ego enorme». (Tengo algo enorme, sí. Aunque no es mi ego). 2. Se tomaba las clases de refuerzo de Literatura que me tenía que dar demasiado en serio. 3. Era muy sexy… y virgen. Al menos, eso era antes de que las clases empezaran a durar más de lo que se suponía. Hasta que un beso inocente se transformó en cien besos profundos, y ella se convirtió en la primera mujer de la que me enamoré. Nuestro futuro juntos después de nuestra graduación universitaria lo teníamos claro: la liga profesional de fútbol americano para mí y la escuela de leyes para ella. Pero me dejó al final del semestre sin ninguna explicación, y desapareció completamente de mi vida. Hasta esta noche. Nos conocimos un martes. Nos convertimos en todo y luego en nada un martes. Y ahora, siete años después, en un martes… 




Hoy os traigo la reseña de una novela que aterriza hoy mismo en librerías, y es una de las primeras novedades del año por parte de la editorial Phoebe Romántica. Ya nos fueron adelantando ciertas cosillas sobre esta nueva novela de la aclamada Whitney G y tengo que decir que desde luego ha sido un buen empiece de año.
Fue un martes es la primera entrega de una serie llamada One Week, en donde conocemos a dos personajes que más diferentes no pueden ser, y creo que eso es uno de los grandes atractivos de esta novela, que se conocen donde menos uno se lo espera e incluso de una manera tan cotidiana que hace más realista la historia. Quizás su trama puede estar trillada y llena de clichés, pero a pesar de todo ello, he conseguido conectar tanto con la historia, como con sus personajes, y creo que en el fondo eso es lo primordial en una novela. La historia comienza en la actualidad, en donde conoceremos al famoso jugador de fútbol americano Grayson Connors, una estrella que desde que salió de la universidad su carrera se ha catapultado. Todo el mundo le adora, excepto una persona, la única persona que lleva sin ver alrededor de 7 años, la única chica a la que quiso y que encima parece que se la ha tragado la tierra, Charlotte ¿donde está? Pero sobre todo ¿qué ha pasado con ella? Con estos antecedentes, la historia te engancha desde el principio.

Y será conforme avance la trama que nos iremos dando cuenta de cómo el destino juega con ellos, volverá a unirlos en una reunión de antiguos alumnos. Charlotte querrá evitarlo y Grayson solo buscará respuestas. Ambos con muchas preguntas que hacerse, el tiempo ha pasado y ellos no son los mismos ¿que siente ahora Charlotte y Grayson? Esa era una de las preguntas que no podía evitar hacerme a lo largo de la historia. Pero al momento dejaremos de estar en el presente para viajar en el tiempo y conocer cómo comenzó su historia, todo es poco con tal de averiguar cómo fue que acabaron así en el presente. Volveremos a su juventud, y veremos como de primeras Charlotte no quería saber ni la hora de Grayson, pues todo lo que se hablaba de él era que era un mujeriego, un fiestero y mil apodos más, que desde luego como lectores, cuando vamos conociéndole nada tiene que ver y es que Grayson ha cambiado mucho de todas esas habladurías que en un principio se decía de él, y todo por culpa de ese verano. Tengo que decir que cuando supe lo de “ese verano” me pareció muy duro y es que a veces la envidia y los celos, sacan lo peor de una persona, por ello las acusaciones que sufrirá Grayson afectarán a su carácter y a su forma de relacionarse, se podría decir que Charlotte será su primera relación seria.

Me han encantado ambos personajes por separado, pues gracias a las dos perspectivas, ayuda entenderles mejor, sus reticencias, sus inseguridades, miedos pero sobre todo sus sentimientos, y es que ambos se encontraran en ocasiones en encrucijadas, sin saber que camino escoger. Y conforme nos vamos acercando al final, iremos descubriendo que los malentendidos son cada vez mayores y que solo el amor sin una buena comunicación de nada vale, pero desde luego tengo que decir que no me lo esperaba así y es que hay un personaje que me ha engañado totalmente ¿quien iba a dudar de que haría tales cosas? El final es previsible, pero creo que lo importante y lo que me ha gustado de esta novela han sido los salto del pasado al presente y viceversa, ha mantenido esa intriga única, era incapaz de dejar de leer, necesitaba saber que les había llevado a actuar como lo hacen, sobre todo Charlotte. Fue un martes es una novela sencilla y fresca, con muchos diálogos que se lee en apenas una tarde, por lo que es ideal para comenzar el año, ¿os animáis a leerla?


miércoles, 9 de diciembre de 2020

Reseña "Luz de luna en Manhattan"












Harriet Knight estaba decidida a superar una vida entera de timidez y decidió que cada día de diciembre haría algo que le diera miedo, incluido celebrar la Navidad sin su familia. Y cuando Harriet, que se dedicaba a pasear perros, conoció a su último cliente, Madi, un perro de aguas exuberante, añadió otro desafío a su lista: lidiar con el arisco doctor Ethan Black, cuidador temporal de Madi, y con la inesperada química que había entre ellos. Ethan creía estar habituado al desorden… hasta que conoció a Madi. ¿Cómo era posible que un perro tan pequeño provocara tanto caos? Para Ethan, la solución era muy fácil. Pagar a Harriet para que compartiera su apartamento de Nueva York y cuidara las veinticuatro horas del animal. Pero lo que le hacía sentir Harriet no tenía nada de fácil. Los besos de Ethan hacían brillar a Harriet más que las estrellas y la luz de luna que bañaba Manhattan. Pero, cuando se acabara su trabajo de canguro del perro y volviera a su casa, ¿se atrevería con el mayor desafío de todos y le haría saber a Ethan que le había robado el corazón de por vida y no solo durante las Navidades? 




Hoy la novela que os traigo es la sexta entrega de “From Manhattan with Love” y una de las que estaba deseando leer tras haber conocido anteriormente a las hermanas Knight, sobre todo a Felicity, pero ahora le tocaba el turno a la dulce Harriet. Ya en “Vacaciones en los Hamptons” pude vislumbrar algo sobre ella, pero desde luego que no me esperaba encontrar todo lo que Harriet tenía por contar. Una de las cosas que me más me gusta de este tipo de novelas es que son autoconclusivas, por cada libro nos cuenta la historia de uno de los personajes que conforman este mundo de su autora Sarah Morgan. Casi todos los libros de la colección han llegado a nuestro país gracias a la editorial Harlequin Ibérica y este último llegó a principios de este año, cuando aún no conocía a su autora y no sabía cuánto iba a adorar la forma de escribir. Luz de luna en Manhattan, nos devuelve a la gran ciudad de los rascacielos y a la vida ahora de la pequeña de los Knight, la más querida y protegida por sus hermanas, y quizás por eso siempre se ha sentido tan poca cosa. Ahora que le toca vivir sola, sin su querida hermana Felicity, tendrá que hacer frente a la soledad, a encontrarse así misma y sobre todo al intentar abrirse al mundo, a pesar de su pequeña dificultad, ese tartamudeo que aparece cuando menos uno lo espera.


Pero desde luego tanto Harriet como yo misma, como lectora, no estaba preparada para conocer al doctor Ethan Black, un doctor lejos de lo que habitualmente estamos acostumbrados. Un hombre arisco, con poco tiempo más que para trabajar y que lo que menos espera es hacerse cargo de un perro, Madi. La hermana de Ethan decidió ponerle en un aprieto con la mascota familiar y ahora tanto su nuevo dueño como la adorable perrita tendrán que convivir. Una convivencia que será un horror para nuestro protagonista, poco acostumbrado a hacerse cargo de nadie que no sea él mismo. Será justo en ese momento cuando los servicios de la empresa de Harriet haga presencia y menuda presencia, en el mismo momento en el que se conozcan todo saltará por los aires, y es que otra cosa no, pero Harriet no está dispuesta a dejar a Madi en manos de ese supuesto doctor. El romance está servido de una manera tierna y deliciosa, no habrá escenas forzadas, todo surgirá de una manera tan natural, que de verdad que ha sido un gusto sumergirse entre sus páginas. Y es que no hay cosa que más adore que el romance que se caldea a fuego lento, que nos va dejando ver lo mejor y lo peor de sus protagonistas, y os aseguro que más de un momento incómodo leeréis. Ambos son tan diferentes que a simplemente vista parecen no encajar, pero es verdad, que a pesar de ser Ethan un gruñón tiene un corazón de oro, poco dispuesto a mostrar nada más que a sus más allegados, lo que desde luego no esperaba es que Harriet con su dulzura y esa paciencia que tiene, más que una santa, se capaz de llegar a tocarle el alma. Por el contrario Harriet descubrirá a plantarle frente a la vida y a salir de ese entorno tan acomodado en el que vivía hasta ahora.



Otro de las cosas que me gusto mucho y que creo que hace que la historia no pierda fuerza, es que sus personajes secundarios tienen un gran valor, ya sea por que nos descubren más facetas de Ethan y Harriet, y porque nos hacen entender cuánto han vivido cada uno, y no hay nada mejor en una novela romántica que los personajes se nos hagan cercanos. También volveremos a reencontrarnos con el resto de la peculiar familia Knight, que seguirán en su línea, sacándonos carcajadas como solo ellos saben hacer. Con respecto al final, que deciros, previsible, pocos giros argumentales, uno podía ya vislumbrar cómo acabaría todo, sin ninguna sorpresa más que el ver como malhumorado Ethan caerá rendido a la dulce Harriet, eso sí de una manera un tanto especial. El ritmo de la novela es ágil y fresco, con muchos diálogos entremezclados con los pensamientos de ambos protagonistas, que hacen que la novela adquiera velocidad y que acabe uno por devorar en apenas horas, y es que otra de las cosas que muchas veces me hacen decantarme por esta autora, que a pesar de ser libros con muchas páginas, no se hacen para nada pesados. Luz de luna en Manhattan es una novela llena de romance, tierna en donde volvemos a encontrar esa adoración por los animales que tanto me gusta.

miércoles, 2 de septiembre de 2020

Reseña "Nosotros en la luna"






Cuando Rhys y Ginger se conocen en las calles de la ciudad de la luz, no imaginan que sus vidas se unirán para siempre, a pesar de la distancia y de que no puedan ser más diferentes. Ella vive en Londres y a veces se siente tan perdida que se ha olvidado hasta de sus propios sueños. Él es incapaz de quedarse quieto en ningún lugar y cree saber quién es. Y cada noche su amistad crece entre emails llenos de confidencias, dudas e inquietudes. Pero ¿qué ocurre cuando el paso del tiempo pone a prueba su relación? ¿Es posible colgarse de la luna junto a otra persona sin poner en riesgo el corazón?


Una historia sobre el amor, el destino y la búsqueda de uno mismo.






Leer un nuevo libro de Alice Kellen es sinónimo de que te va a tocar el corazón y quizás cuando acabes la lectura, no vuelvas a ser el mismo. Pues algo similar es lo que me ha sucedido con esta novela. 

Cuando salió ya a principios de año me enamoré de su portada, y sobre todo de su título,  Nosotros en la luna, un titulo que podía significar miles de cosas pero que algo especial iba a tener. No ha sido hasta que iba avanzando en la historia, cuando me di cuenta de que esa frase se me iba a quedar muy grabada. 


La historia comienza con un encuentro casual entre Ginger y Rhys en pleno metro de Paris. Ella desesperada por sacar un billete, él simplemente pasaba por allí. Un destino caprichoso que enlazará sus vidas de una manera única. Una relación que irá evolucionando paso a paso, desde una tierna amistad, que ya apuntaba de otras maneras, a lo que será quizás un amor de película. 

Creo que una de las cosas más importantes de este libro, han sido sus personajes. Ginger y Rhys, ambos con vidas totalmente distintas. Ella siendo una persona con toda una vida ya organizada, solo teniendo que seguir unos patrones ya marcados. Y él, directamente una veleta sin rumbo fijo, con solo una idea en la cabeza, vivir feliz haciendo lo que más le gusta. Dos mundos que chocaran de una manera descontrolada, que a su vez se complementan de una forma especial. Irán descubriendo que la vida no es blanco o negro, sino que entre medias hay una cantidad de grises que les llevaran por caminos inesperados. Tengo que decir que ha sido un placer el poder ir descubriendo la perspectiva de cada uno de ellos, porque como lectora ha conseguido afianzar los sentimientos que me han ido generando ambos personajes conforme avanzaba la trama. Les he podido descubrir desde esa felicidad o ese primer cosquilleo generado por los mensajes de Rhys a Ginger, hasta los momentos quizás más caóticos por los que pasara su relación. 



En este aspecto su autora no ha querido dejarse nada en el tintero y a pesar de ser una novela romántica, creo que es mucho más, ya que nos enseña valores de vida, de amistad, familia y amor. Este último un motor que llevará a nuestros protagonistas a tomar decisiones descabelladas y que acabarán poniéndoles en más de un aprieto, pues a veces es difícil expresar todo lo que uno lleva por dentro, y los miedos al rechazo comenzaran aparecer. Todo ello no solo se verá reflejado de una manera narrativa, sino que también podremos leer los miles de email que se escriben Rhys y Ginger, email que cuentan tanto de su vida, que me ha dado la sensación de cercanía. 

También sus personajes secundarios tendrán un valor añadido, pues habrá momentos que serán ellos los encargados de darles esos empujones para hacerles ver, que la vida consiste en arriesgarse, en jugársela y después ver que es lo que sucede.

La ambientación creo que también ha sido una parte muy importante de la novela, pues viajaremos a numerosos sitios, sobre todo con Rhys: Londres, Paris, Estados Unidos, Australia… En todos ellos iremos descubriendo pequeños retazos sobre como han sido sus vidas antes y como han ido evolucionando hasta el momento actual que marca la historia. 



Ese juego de pasado y presente, ha hecho que entendiera más sobre la relación de Rhys con sus padres, por ejemplo, o como en un momento puntual la vida de ambos se separan, descubriendo por mi misma si el amor que dicen sentir es real o es solamente un idilio del momento. 

Que decir de su final, ¿lo esperaba? Sí, y también lo deseaba, ya que durante su trama he sufrido bastante con algunos de los momentos entre ambos, en ese tira y afloja que por un segundo temí que mandara al traste su relación. 

Y quizás otro detalle que me ha encantando ha sido la importancia de “El principito” en la novela, lecciones de vida que le irá dando Ginger a Rhys de una manera sencilla y comedida. 



“Nosotros en la luna” es una novela tierna, romántica, detallista y que se lee de una sentada, porque desde el minuto uno, me ha sido totalmente imposible dejarla. 


martes, 5 de mayo de 2020

RESEÑA: Muy tentador

Buenas tardes soñadores,

Martes de reseña y hoy definitivamente os traigo una recomendación si lo que estáis buscando es una historia romántica, que os haga disfrutar de un buen rato pero sobre todo que os haga que os emocione, entonces si ninguna duda, quédate por aquí y sigue leyendo.




Muy tentador es lo último que llega a nuestro país de Ilsa Madden-Mills, publicado bajo el sello de Phoebe Romántica y que fue publicado ayer, día 4 de mayo, por lo que podréis encontrarlo en todas las plataformas. Para los que ya habéis leído algo de esta autora, deciros que sigue muy en la línea de sus anteriores novelas, es decir, una lectura rápida y entretenida que desde el principio ya nos plantea una trama que hará que nos enganchemos a sus páginas. Así que vayamos un poco más allá y os voy comentando porque me gustó esta historia.

Nora y Leo. Leo y Nora. Estos serán nuestros personajes principales. Ambos de mundos distintos y con unos pasados que pesan demasiado, sobre todo por las cicatrices que les han dejado. 

Primero hablemos de Nora Blakely. Nora es el típico prototipo de chica americana con dinero, que sabe que es buena en lo que hace. Notas excepcionales debido a su alto coeficiente intelectual y con un futuro prometedor. Aunque conforme vayáis conociéndola os iréis dando cuenta de que no es todo lo que intenta hacernos ver, pues se siente  muy incomprendida por tanto por su familia como por sus compañeros de clase. 

Su vida en general está totalmente en manos de su madre, que no dudará en manipularla a su antojo, haciéndola sufrir con sus desprecios constantes, minando con ello su autoestima y dejando momentos escalofriantes. 

Ha sido un personaje con muchos claros y oscuros, momentos en los que se verá a una Nora fuerte y valiente y otros en los que su autodestrucción llegará a puntos extremos, como ese anhelo por ser querida.




En el otro lado tenemos a Leo Tate. Recién mudado a Texas y acompañado por su hermano Sebastian. Ambos huérfanos de padres pero dispuestos rehacer sus vidas. Lo que no se esperan y realmente el comienzo de todo, es lo que sucederá en el evento de puertas abiertas del nuevo instituto de Sebastian. Será en esos primeros instantes donde para mi se fraguará esta historia de amor. Una mirada. Un flechazo. 

Si algo tienen en común ambos personajes principales, quizás es el miedo al rechazo, al abandono, al no sentirse queridos y sobre todo al perderse a sí mismos. Esto se verá muy bien reflejado gracia a que la autora narra la perspectiva desde los dos personajes. Tendremos capítulos en la mente de Nora y otros en la de Leo. 

Pero esta novela no solo nos ofrecerá una historia romántica de tiras y aflojas, sino mucho más, como el tema de la amistad, que Nora irá fraguando con Sebastian y Mila o la de aceptación de uno mismo, como aprenderá con Teddy, un personaje secundario que tiene autismo y a quien conocerá tras entrar en la banda de música de los hermanos Tate. 

La vida de ambos dará un vuelco que ya os digo que yo estuve en vilo páginas tras página, por no hablar de la tensión del final de la novela, en donde el pasado de Nora volverá con un nombre específico y que hará que se desbaraten todos su planes. 

A pesar de que el final me ha parecido bueno, no me lo esperaba así, creo que sucede todo demasiado rápido y me deja sin palabras. Me hubiera encantado que se hubiera desenvuelto con más matices, conociendo un poco más en profundidad la situación, pero aún así me ha sorprendido para bien. 

En sí, Muy Tentador es una novela de altibajos, con giros inesperados pero con un final previsible que hará que como lectores y amantes de este género pasemos momentos entretenidos. 

martes, 21 de abril de 2020

RESEÑA: Nadie muere en Wellington

Buenas tardes soñadores,

Hoy os traigo una nueva reseña y os invito a viajar conmigo hacia las antípodas ¿que de qué estoy hablando? Bueno, pues coged la maleta que nos vamos de viaje y lo hacemos con Carmen Sereno.



Nadie muere en Wellington es lo último publicado por la autora Carmen Sereno que salió el pasado 11 de marzo bajo el sello Chic, y que podéis encontrar en todas las plataformas digitales. Es una nueva novela romántica con toques dramáticos, pero con una ambientación espectacular.  

Su historia en general sucede en el pasado, allá por 1999 y con el efecto 2000 pisándonos los talones. Emma nuestra protagonista será quien nos haga hacer la maletas en búsqueda de un respiro, y es que su trabajo como forense ya no le llena y tras el fallecimiento de su último pariente vivo, romperá con todo lo que conocía para embarcarse en una auténtica aventura, descubrirse así misma, al otro lado del mundo ¿y qué puede salir mal? Creo que esa es una de las preguntas que nos haremos como lectores mientras la acompañamos hasta Wellington, Nueva Zelanda. Los comienzos nunca son fáciles pero aún así Emma tendrá mucha suerte tras encontrar una pequeña cafetería en donde su propietario, David, la contratará como camarera a pesar de sus dudas. David es un hombre huraño, poco comunicativo y con un pasado que intenta ocultar bajo grandes losas. El misterio sobre este personaje esta servido, aunque su autora nos irá dando pistas de lo que se esconde detrás.

La historia irá avanzando y nosotros con ambos personajes descubriendo la isla, pues la autora nos irá describiendo cada una de las escenas como si fuéramos nosotros los que estaban allí mismo, e incluso podréis ver que no ha dudado en hacernos incluso participes de palabras o expresiones típicas, poniéndonos aun más en situación. Y es que la belleza de Nueva Zelanda queda descrita página tras página. 



Aunque durante la trama también tendremos esos famosos tiras y aflojas por parte de nuestro protagonistas principales, aunque en ocasiones estos se harán un poco repetitivos, sin ofrecernos nada nuevo, más que dos personas intentando ceder y sin llegar a ningún punto de entendimiento. Tengo que decir que David, me ha resultado demasiado veleta, es decir, si Emma ya se encontraba confundida con sus idas y venidas, en mi caso era aún más, al ver que el pasado tenía tan encadenado a David que no sacaba el valor para decirle lo que siente y Emma tampoco se hacia valer como para decirle lo que ella estaba sintiendo. Un drama en toda regla.

Menos mal que a veces los personajes secundarios tienen una gran importancia y para mi en este caso ha sido sin ninguna duda el moarí Kauri, quien parece entender más a los dos de los que ellos mismos lo hacen. De todos los personajes quizás este ha sido mi favorito y del que sin ninguna duda estaría encantada de conocer más, tanto de él como de su cultura.

¿Y que esperar de su desenlace? Previsible, pero eso sí, con fuerza. Era lo que estaba esperando saber, todo sobre David, el por qué de como es y la verdad es que la autora no se ha andado por las ramas, nos ha ofrecido un David con cicatrices pero con muchas ganas de curarlas. Quizás lo único que no terminó de encajarme fue su epílogo, creo que no hacia falta más para poner el boche de fin. 

En sí la novela, Nadie muere en Wellington ha sido una historia llena de altibajos que en ocasiones me ha costado un poco seguirle el ritmo a los personajes, porque no terminaba de conectar con ellos, pero que tiene una potente parte de ambientación que ha sido genial para viajar hasta las antípodas sin salir de casa. 


martes, 28 de enero de 2020

RESEÑA: Amar a Jason Thorn


Buenas tardes soñadores,

Otro martes más os traigo una nueva reseña. Esta ha sido una de mil últimas lecturas y todo gracias a Phoebe Romantica, quien a través de sus redes nos ha dado la oportunidad a numerosos lectores de poder leer lo nuevo de Ella Maise. 

Tengo que deciros que es la primera vez que leo algo de esta autora y de verdad que me ha sorprendido. Antes de su publicación el pasado 20 de enero, había leído su sinopsis y a pesar de que la temática puede parecer algo trillada, tenía muchas ganas de conocer a Jason y a Olive, que le vamos hacer si soy una auténtica loca empedernida de la romántica. 

Pero vayamos al lío que por eso andáis leyendo esta entrada. ¡Dentro reseña!



La historia comienza en el pasado, Jason Thorn es el mejor amigo del hermano mayor de Olive, Dylan Taylor. Es el eterno vecino de al lado que pasa más tiempo en casa de los Taylor que en la suya propia y es que Jason a pesar de su edad lleva consigo una carga que no es propia de un niño de apenas diez años. Una madre alcohólica y un padre desentendido de todo no es la mejor familia que puede tener un niño, por eso la familia Taylor no tardara en adoptarle como uno más. Y lo que comenzó siendo como un amor de niños poco a poco nuestra protagonista Olive lo irá sintiendo como mucho más que eso. Aunque todo se truncará cuando reciba un mensaje de texto y su corazón se haga pedazos, por no hablar de la marcha de Jason. 

Rápidamente saltaremos a un futuro en donde no sabremos que habrá pasado con ambos, ya que tras la marcha de Jason la vida no volvió a ser igual y cada uno tomo rumbos distintos. Un rumbo que los llevará a Los Angeles y es que el destino como siempre tan caprichoso, les hará volver a reunirse de la manera que uno menos espera. 

Olive Taylor se ha convertido en una escritora de éxito con su primera novela. Y esta totalmente dispuesta a aprovechar esa ola  para que los grandes productores lleven a la gran pantalla la historia de Isaac y Evie. Pero lo que menos esperaba es que en esa reunión aparezca el aclamado actor Jason Thorn. 

No os voy a mentir la cara de ambos será épica y es cuando a partir de aquí sus caminos se irán entrelazando, quizás porque ambos sienten nostalgia, quizás porque donde hubo fuego cenizas quedan, pero sobre todo porque son JASON y OLIVE. Aunque de primeras podríamos tener la historia hecha, la cuestión es que todo se complicará más aún, cuando Jason le haga una propuesta que Olive a pesar de querer rechazar no podrá y es que ¿quién no querría ayudar a Jason Thorn?



Poco a poco iremos viendo como ambos van aclarando todos esos aspectos que debido a su juventud no fueron capaces y también el poder conocerse más allá de ser el mejor amigo de su hermano mayor, una etiqueta que a Jason le costará quitarse, ya que para él Olive es la indiscutible hermana pequeña. 

Ese tira y afloja nos llevará a momento muy épicos y otros en los que como lectores deseamos no haber leído, pues es que tanto Jason como Olive se irán mintiendo bajo nuestra piel, conviviendo un único final. 

Durante este camino, no lo recorreremos solo con ellos sino también con el resto de un elenco que creo que es primordial. Marcus, el ex de Olive, que hará que haya momentos en que lo odiemos, y bueno yo no le he dejado de odiar. Charlotte, una de las amigas de Olive, que queréis que os diga, no os dejéis engañar, cuando lo leáis ya me entenderéis. Y por última, Lucy, la gran Lucy que nos aligerara esos momentos donde la tensión haga que tengamos de explotar, sus comentarios dicharacheros y su diversión será palpable en todas y cada una de las páginas de esta novela. Y ya que estamos hablando de Lucy espero no tardar en conocer su historia (guiño, guiño).

Amar a Jason Thorn es una novela que a pesar de ser previsible por su final, es de esas historias que se hacen adictivas y en las que sabes que cuando lo empiezas no puedes evitar engancharte hasta el final. 

jueves, 26 de diciembre de 2019

RESEÑA: Ni dulce ni amargo


Buenas tardes soñadores,

Después de las primeras fiestas, ya estoy de nuevo por aquí con una nueva reseña. En esta ocasión es un libro que llegó a mis manos por azar o quizás sería mejor decir, buceando en Amazon. Últimamente me he aficionado demasiado a los ranchos y todo lo que tenga que ver con los chismes que surgen en estos pequeños pueblos.




Ni dulce ni amargo es lo último de la autora Sarina Bowen que ha llegado a nuestro país, pues esta novela aterrizó el 3 de octubre de este año bajo el sello de Vergara. No había leído nada de esta autora y la verdad es que me ha sorprendido con su narrativa, fácil de leer y rápida. A pesar de lo que muchos podáis considerar de sus 366 páginas, un tocho considerable de páginas, se lee con mucha facilidad y sin apenas darte cuenta la novela se desarrolla con soltura, haciendo que sea una lectura amena y entretenida.

El por qué me decante por esta historia fue sin duda por su sinopsis y me pareció que iba a encontrar todo lo que buscaba en este momento: romance, ranchos, líos, drama y comedia. Un combo que sabía que me iba a gustar.

La novela comienza directamente ofreciéndonos una visión de Audrey Kidder, nuestra protagonista, contándonos lo difícil que ha sido su vida y como poco a poco ha sabido salir a flote a pesar de todas las dificultades que se le ha presentado. A simple vista puede que veamos a la simple protagonista con una familia rica, que se queja por quejar, pero como siempre las apariencias engañan. Por seguir su sueño se verá de camino a Vermont a intentar convencer a una serie de granjeros a que apuesten por la empresa para la que trabaja.  Tras un desafortunado incidente se verá rescatada por quien menos imaginaba, pues Griffin Shipley pertenece a su pasado.

Por el contrario Griffin Shipley lo que menos esperaba es encontrarse a la dulce Audrey metida en una de las zanjas de su granja. La última vez que se vinieron la situación no acabó como él esperaba. Griffin también ha cambiado, ahora es el propietario de una granja que crea la mejor sidra del condado y su sueño es llegar a comercializarla a importantes restaurantes.



Ambos perseguirán sus propios sueños hasta que el destino vaya uniendo sus caminos, volviendo a conocerse o más bien conocerse como debieron hacer hace mucho tiempo. Serán numerosas las escenas que harán que no podamos aguantar la risa y no solo por lo que nos ofrecerán los protagonistas, sino el resto del elenco, la madre de Griffin que no dudará en contratar a un ex presidiario, las hermanas y el hermano de Griffin que hacen de las comidas todo un show, el primo que viene a ayudar con la cosecha y no dudará en ligar con todas e incluso la madre de Audrey, quien nos regalará momentos de lo más dramáticos.

Respecto al final, que os puedo decir, previsible de una manera romántica, pero como siempre os digo, no solo es en sí el concepto de “felices para siempre” sino el hecho de cómo se desarrolla la trama. Todo se lo jugarán a una baza y es que hay a veces que para ganar hay que perder, eso es algo que tanto Griffin como Audrey tendrán que aprender de la peor manera.

Quizás por poner algún pero a este novela, que desde primera no sabía lo que me iba a encontrar y de la que no llevaba ninguna expectativa, es la cantidad de escenas de sexo que se desarrolla en la novela, que a mi parecer a veces no las veía relevantes, pues los sentimientos entre ambos estaban más que claros.

Ni dulce ni amargo, ha sido en sí una novela divertida, con una trama sencilla que hace que esas tarde de diciembre se pasen volando ayudando en este caso a Griffin y a Audrey a crear la mejor sidra del condado.

Con que más puedes soñar

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