Buenas
tardes soñadores,
Aquí estoy de vuelta con fuerzas
renovadas y con ganas locas de contaros una de mis últimas lecturas. Quizás
muchos sois los que ya conocías esta serie de libros pero quizás otros tantos
no. Aun así, fuera como fuese, espero que os quedéis por aquí hasta el final y
me comentéis vuestras opiniones al respecto.
Ahora sí, sin más dilación agarraos
fuerte que nos vamos de cabeza al Londres del siglo XIX, a la época en donde
una asesino en serie tenía a la mitad de la población horrorizada con sus crímenes,
vayamos a descubrir e investigar las pista que ha ido dejando ¿le
desenmascaremos?
A la caza de Jack el Destripador es
el primer libro de una serie de novelas victorianas escrita por Kerri Maniscalco,
quien ha cautivado a la mayoría de los lectores, primero con el diseño de sus
portadas y más tarde por sus sinopsis. Tengo que deciros que no había leído nada
aún nada de esta autora y ha sido todo un descubrimiento el poder hacerlo.
Iniciamos esta historia en un sótano, para ser más exactos en el sótano de su tío, un importante forense de la época,
que no dudará en enseñar a su sobrina, Audrey Rose, los misterios del cuerpo
humano. Audrey Rose es una joven
intelectual, adelantada a su tiempo, quien no dudará en seguir formándose en
ciencias y medicina, a pesar de la oposición de su padre. Junto a ella y su tío,
también habrá otro joven estudiante, Thomas Cresswell, que está realizando prácticas
de medicina y que debido a su sentido del humor dejará a nuestra protagonista
en fuera de juego en más de una ocasiones.
Ambos jóvenes se verán inmiscuidos
en los numerosos casos que tiene la policía en entre manos. Una relación que de
primeras pudiera ser mal avenida, por sus diferencias, y poco a poco se irá
fortaleciendo cuando empiezan a aparecer los primeros cuerpos mutilados en las
calles de Londres y les toque salir a cazar al asesino.
Serán numerosas las pistas que nos
irá dejando a su paso nuestro Jack el Destripador, haciéndonos dudar de todos y
cada uno de los personajes, porque en el fondo todos esconden algo oscuro que
no quieren que sea descubierto, desde los más cercanos a Audrey Rose hasta
aquellos que nos irán sorprendiendo con sus apariciones, como sucederá con el
comisario Blackburn.
La ambientación ha sido una de las
mejores partes de la novela, pues su autora no dudará en ofrecernos ese siglo
XIX tal y como era, en donde la sociedad no valora la figura de la mujer, por lo
que Audrey Rose tendrá que luchar contra todos los convencionalismos que
suponen su estatus y época. Es un tira y afloja que veremos que se desarrolla con
cada uno de los personajes masculinos, quienes verán como ella poco a poco se
va haciendo hueco en un mundo dominado por los hombres.
De igual manera, y otro punto muy a
su favor, ha sido que la escritora ha querido meternos tan de lleno en la situación
que incluso en algunos capítulos, en el final, nos ha dejado dibujos o
fotografía de la época, pudiendo que como lectores hacernos una idea de cómo
era todo.
Quizás lo único que no me ha convencido del todo ha sido esos momentos de romance juvenil que se han visto
forzados en ocasiones, haciendo que ese posible amor que se pudiera haber
cocido a fuego lento, se viera precipitado por la trama en sí, centrada en esa búsqueda
de Jack el Destripador.
Gracias a la narración de Kerri
Maniscalco nos veremos devorando el libro de principio a fin sin poder parar o
eso es al menos lo que me ha sucedido a mí. Y es que el final ha estado lleno
de altibajos, momentos tensos y algunos que harán que se nos rompa el corazón con
ese desenlace. Las últimas páginas del libro serán solo un punto y aparte,
dejando abierto no la historia en sí, pero si la continuación de la trama con
respecto a nuestros protagonistas.
A la caza de Jack el Destripador es
una novela de misterio totalmente adictiva,en donde como lectores nos veremos catapultados
por las calles de Londres buscando pistas para poder atrapar al asesino junto
con Audrey Rose y Thomas.
¡Por mi parte ya estoy deseando leer
A la caza del Príncipe Drácula!